Efectivamente, la duda es saber si el movimiento alcista de estas 2 últimas semanas es un simple rebote o un nuevo movimiento al alza.
En los procesos alcistas de la renta variable, normalmente se producen las siguiente opciones:
Opción 1: Renta variable americana sube y renta variable europea sube.
Opción 2: Renta americana sube y renta variable europea rebota, para a continuación renta variable americana descansa en su movimiento al alza y renta variable europea continúa su caída.
Opción 3: Renta europea sube y renta variable americana rebota, para a continuación renta variable europea descansa en su movimiento al alza y renta variable americana continúa su caída.
Sin embargo, en esta ocasión la renta variable europea estuvo cayendo, mientras la renta americana seguía subiendo, y ahora resulta que la renta variable europea sube mientras que la renta variable americana cae. Es decir, es un comportamiento un poco anómalo.
El pasado viernes la renta variable europea abrió con hueco al alza y parece que puede confirmar un movimiento al alza, a falta de superar en cada índice los máximos previos, cosa que por el momento solo ha hecho el EUROSTOXX50, y no así el IBEX, el CAC o el DAX.
En el gráfico diario actual del IBEX podemos ver que el IBEX ha dibujado una onda «A-B-C» que podría dar por terminado el retroceso iniciado el pasado 16 de enero, pero también es cierto que el viernes no hubo incremento de volumen, y no se han superado los máximos del pasado 6 de marzo a 10.360. También sería posible que el IBEX esté dibujando una estructura triangular «A-B-C-D-E», y que en consecuencia el movimiento lateral no haya finalizado.
Desde mi particular punto de vista, habría que creer en el movimiento al alza, con la siempre posible opción de estar equivocado, si el IBEX supera los 10.360 a cierre diario, y lo mismo sucede con el CAC, cuyo máximo a superar serían los 4.435, y con el DAX XETRA, cuyo máximo a superar serían los 9.725 puntos.
